Adecos resisten en La Florida sin luz ni agua

Caracas.- La dirigencia de Acción Democrática asegura que en el partido no hay división, sino una depuración. El expulsado Bernabé Gutiérrez, amparado por el Tribunal Supremo de Justicia controlado por el chavismo, dice que llegada la hora, tomará posesión de la sede principal, ubicada en La Florida.

En Acción Democrática sacan la cuenta de "los cañones disponibles". La expulsión de Bernabé Gutiérrez, hasta ahora, no ha causado división en las estructuras del partido, que arriba en septiembre a 79 años de fundación.

Los adecos alegan que no hay división sino depuración. Insisten en que esto no se trata de una batalla ideológica, sino de la intervención directa del régimen para dinamitar a los partidos políticos y diseñar una oposición "a la medida". Y recuerdan que no son abstencionistas, pero que en las actuales condiciones, se hace imposible participar en lo que tildan como una "payasada electoral".

Pero el Tribunal Supremo de Justicia en Sala Constitucional le dio a Gutiérrez la tarjeta y los símbolos del histórico partido socialdemócrata, algo que probablemente conduzca a una toma de las casas de Acción Democrática con el uso de la fuerza.

"Aquí los estamos esperando", retó Ramos Allup en una rueda de prensa repleta de militantes.

De allí que el Gobierno haya ordenado cortar la luz y el agua desde hace diez días a la sede de Comité Ejecutivo Nacional de AD en La Florida, un edificio de siete pisos que los blancos se resisten a abandonar.

Todavía Henry Ramos Allup despacha desde su oficina. Sin luz. Pero despacha. Y sigue contando los cañones, por si acaso.