Editorial: Elliott Abrams estrelló de golpe la fantasía de María Corina Machado

Caracas.- No es casualidad que durante las últimas 72 horas, dos altos cargos de la Administración de Donald Trump se hayan pronunciado sobre la fantasía morbosa de una invasión militar externa. James Story y Elliott Abrams dispararon misiles por debajo de la línea de flotación a quienes han insistido torpemente en algo que no tiene ni pies ni cabeza.

La socióloga Colette Capriles advertía en una entrevista concedida a El Cooperante el pasado 15 de junio, que plantear algún tipo de operación militar conjunta externa para derrocar a Nicolás Maduro no era una propuesta política.

"Yo creo que no es un discurso político, sino de la víctima, que no funciona para cambiar nada. Eso es un error político. El problema de esa postura es que es meramente emocional, porque es una postura antipolítica que hemos tenido en Venezuela desde el segundo período de Carlos Andrés Pérez: la antipolítica en contra de los partidos"Colette Capriles

Pero ningún llamado a la sensatez ha calado en los últimos años. De la "salida" al "quiebre" y del quiebre a la "Operación de Paz y Estabilización", María Corina Machado no solamente se ha dedicado a la procura de la implosión de la oposición y al sabotaje, sino que también opera indirectamente contra sus propios intereses, pues como la mentira tiene patas cortas, más tempano que tarde Estados Unidos terminaría metiendo el dedo en la llaga a favor de la sindéresis y de la política, dejándola como efectivamente quedó.

De allí que tras la penosa carta de Machado a Guaidó, el encargado de Negocios James Story respondiera que solamente la unidad en torno a Guaidó garantizaba presión internacional.

Creo que hay personas que piensan que ellos pueden salir de las cenizas si hacen autoataques a la oposición democrática. Creo que ellos no tienen razón.James Story

Y más tarde, Elliot Abrams disparaba en forma directa contra Machado, comparando sus ideas nada menos que con el "realismo mágico" de Gabriel García Márquez.

María Corina tiene el derecho de decir lo que quiera y no lo voy censurar ni remarcar. Pero me recuerda al realismo mágico de Gabriel García Márquez. Hace un llamado a un plan B, que no creo sea una propuesta sensata a lo que la gente necesita. Se debe empezar desde las bases con cada uno de los venezolanosElliot Abrams

De manera tal que la reacción ante semejantes declaraciones haya sido la de huir por la derecha -literalmente por la derecha-, argumentando que una cosa piensan los funcionarios de la Administración Trump y otra cosa piensa el presidente de Estados Unidos, como si no supieran atar cabos y como si la política del gobierno norteamericano fuera un festín de declaraciones contrapuestas sobre un tema tan serio como el de Venezuela.

Si alguna lección deja todo este intercambio directo e indirecto de declaraciones, es que la fantasía no puede seguir siendo la ruta de algunos en el país. No se puede prometer lo imposible ni proponer la inacción definitiva esperando por unos militares que jamás llegarán, como no llegaron a Cuba.

Y Venezuela no puede ser otra Cuba.