"Es una medida cosmética": Venezolanos dudan impacto de reconversión monetaria

Caracas, 23 de marzo.- Los venezolanos dijeron este viernes que carecían de confianza en la decisión del presidente Nicolás Maduro de derribar tres dígitos del bolívar en crisis en medio de una hiperinflación creciente.

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La medida para dividir el bolívar entre 1.000 entrará en vigencia a partir del 4 de junio, anunció este jueves el jefe de Estado. Se emitirán nuevos billetes, aunque no habrá cambios en el valor del bolívar. Los críticos dijeron que la medida no tendría ningún impacto en la economía arruinada por la crisis y que simplemente cubre los altos precios y la caída de la moneda.

Millones en Venezuela ganan solo un dólar o dos mensualmente a tasas del mercado negro y sufren escasez de alimentos y medicinas. Los precios subieron más de 2.600% en el último año, según la Asamblea Nacional. Hay una grave crisis de efectivo. "Un gobierno autoritario hace lo que quiere. Esto no va a detener la inflación", dijo a Reuters José Vásquez, de 46 años, que vende café a la salida de una estación del Metro de Caracas.

El bolívar ha caído 99,99% frente al dólar estadounidense en el mercado negro desde que Maduro llegó al poder en abril de 2013. Si la inflación continúa como lo ha hecho durante el último año, se requerirá otra redefinición en 20 meses. "Es una medida cosmética, que no afecta el resultado final", dijo el economista Asdrúbal Oliveros.

"Después de unos meses, tendrá que seguir emitiendo nuevas facturas o decidir eliminar más ceros de la moneda", agregó Oliveros. Maduro culpa de la crisis económica a Washington y a la oposición del país. Se enfrenta a la reelección en mayo, aunque es probable que gane contra una oposición que ha boicoteado en gran medida el voto.