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Investigación

¿Idolatría o fe? Caraqueños piden al "Santo Hugo Chávez" remediar la crisis

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Caracas, 5 de octubre.- "Vengo acá todas las semanas a traerle flores y una vela. Mi comandante murió por su pueblo y como pueblo debemos seguir en la lucha. Su legado no solo es ir a marchar y votar. Acá vengo a rezarle y pedirle por la paz", es parte del testimonio de Maritza Pérez, quien con una camisa blanca y un pantalón rojo veneraba al fallecido Hugo Chávez en un altar ubicado en el 23 de Enero, en el oeste de Caracas.

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La cola de visitantes del "Cuartel de la Montaña" ya no es la misma de otros tiempos. El pasar de los años y el recrudecimiento de la crisis económica ha mermado la afluencia del hombre que logró mantenerse en el poder entre el 2 de febrero de 1999 y el 5 de marzo de 2013. Hasta 2016 los cánticos y las plegarias no cesaban sino hasta que caía la noche. Mientras que la capilla 'Santo Hugo Chávez' inaugurada en 2013 se quedaba pequeña para la gran cantidad de ofrendas que llevaban sus seguidores, hoy la situación es totalmente distinta.

La precaria capilla construida con madera y techo de zing, aún está inundada de fotografías de Chávez, aunque muchas muestran el rastro de la humedad y el tiempo, así como de ramos de flores, velas y estampas de santos. "Ya la gente no viene mucho. Los pocos que vienen se persignan, rezan y hablan de sus problemas", indicó una persona que vive en Montepiedad y pidió no ser identificada.

Foto: Cortesía

"He venido a darle las gracias a mi Chávez de la vida. Hace 15 días le pedí por una nieta de once meses de nacida que tenía bronquitis. No conseguíamos los medicamentos. Oré con fe y una institución gubernamental nos los entregó. El es milagroso. Ni estando en el cielo ha querido abandonar a los pobres", señaló entre lagrimas Marilú Espinoza, una sexagenaria de Caricuao que acudió con dos girasoles a la capilla.

Por su parte, Andrés Higuera, un colombiano con 23 años en Caracas, acudió a la capilla a pedir un "milagrito", quiere que se acaben las colas para conseguir alimentos y la escasez de medicamentos. Aunque ambos problemas los atribuyó a la "guerra económica" contra Nicolás Maduro dice confiar en que Chávez le dará fortaleza y sabiduría a "su hijo". 

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Desde que recibió los restos mortales de Chávez, la rutina de este sector popular caraqueño, tradicionalmente dominado por colectivos y comunistas, ha cambiado y su aspecto también. Sus calles están más limpias y seguras. "No hay un día que no estén trabajadores de la alcaldía limpiando. Siempre están haciendo algo. Quizás lo hacen porque aún grandes camionetas blindadas suben al cuartel", relató una fuente.

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De trinchera golpista a sepulcro presidencial

El ahora "Cuartel de la Montaña" fue el espacio que dio la bienvenida a Hugo Chávez al terreno de la política, pues allí se refugió tras el fracaso del golpe de Estado que dirigió contra el Gobierno de Carlos Andrés Pérez, el 4 de febrero de 1992. La edificación, construida a principios del siglo XX por el presidente Cipriano Castro (1899-1908), posteriormente se transformó en Museo Histórico Militar y en el Cuartel 4 de Febrero tras la restauración que Chávez ordenó se le hiciera en 2002.



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