Jesús Seguías: Prometer el cese de la usurpación fue un acto de ignorancia política

Caracas.- Jesús Seguías cuestiona la estrategia de la oposición de no concurrir a las elecciones parlamentarias. Advierte que la abstención es un error político y llama a la dirigencia a "pisar tierra", pues es falsa la premisa de que "todas las opciones están sobre la mesa". Y sentencia que prometer el famoso mantra fue un acto de ignorancia política.

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Seguías es analista político y presidente de la encuestadora Datincorp. En una entrevista telefónica concedida a El Cooperante, aseguró que el mantra planteado del "cese de la usurpación" fue un acto de "ignorancia política" pues la oposición "no ha sabido caracterizar al adversario".

La oposición ha decidido volver a la abstención. ¿Comete un error?

Sin duda alguna. Es un grave error político. No tanto electoral sino político. La oposición en este instante está muy menguada internamente. Con lo único que está contando es con el apoyo internacional, que también tiene grandes limitaciones, incluyendo a los Estados Unidos. Eso de que todas las opciones están sobre la mesa en realidad no es verdad. Estados Unidos, por diversas razones, no puede declarar la guerra de manera fácil a nadie. Estados Unidos no puede enviar tropas a Venezuela, no estarían dispuestos a llegar a las últimas consecuencias, ellos tienen un límite. La oposición no puede estar contando con soldados extranjeros porque nadie es idiota. Nadie va a exponer la vida en Venezuela cuando los venezolanos no están dispuestos a hacer lo mismo por su propio país.

La oposición venezolana, su capacidad de movilización interna en materia de protesta popular, de manifestaciones, por ahora está descartada. Nadie tiene el liderazgo en el país para controlar a una muchedumbre echada a la calle en forma desordenada, anárquica, violenta. Lo que yo vengo sosteniendo es que no nos queda más a los venezolanos, tanto del gobierno como de la oposición, que comprender que la situación del país se le escapó de la manos a todo el mundo. Nadie puede controlar al país en las condiciones en que está en este momento. Nicolás Maduro no tiene la capacidad para hacerlo y la oposición venezolana para ser franco, tampoco tiene la capacidad para hacerlo por diversas razones. Entonces cualquier rendija que se presente en el escenario político es un deber aprovecharla.

Tras las elecciones parlamentarias mucho diputados fueron apresados, otros encuentran en el exilio y los cuatro gobernadores de la oposición fueron despojados de sus competencias. Mucha gente se preguntaría de qué sirve votar si el régimen desconoce las autoridades electas.

El tema no es en este instante quién es el protagonista. Los partidos políticos tienen todavía una reserva inmensa de dirigentes. ¿Cómo es eso de que si no soy yo, entonces no es nadie? ¿El gobierno está jugando duro? Sí. ¿Y es que acaso alguien se engañó al respecto? Yo quiero que me lo digan. ¿Alguien se engañó creyendo que el gobierno no estaba dispuesto a jugar duro y sucio? Pareciera ser que hay políticos que ahora se sorprenden como unas beatas de un convento. ¡Por Dios! Desde antes de que ganara Chávez yo sabía ya lo que venía. Yo, un simple ciudadano ¿Cómo es que los dirigentes políticos no lo van a saber?

Han pasado 20 años y todavía no lo saben. 20 años y no han caracterizado al enemigo y por lo tanto, no han podido planificar sus estrategias. El inmediatismo ha matado a la oposición. Yo creo que ha llegado el momento de pisar tierra, elaborar un diagnóstico correcto de lo que tenemos en la mano, evaluar correctamente al adversario y no como quisiéramos que fuese.

Ya cuando la vía de los golpes de estado no funcionaba, la vía de las grandes manifestaciones no funcionaba, entonces decidieron actuar en términos electorales hasta que el 12 de febrero del 2014, surgieron unos dirigentes políticos de oposición que salieron con la mayor irresponsabilidad del mundo a plantear una vía que contradecía totalmente a la línea electoral y ahora estamos entrampados: no estamos con la línea electoral y tampoco estamos haciendo ningún tipo de acciones de calle.

¿Usted le atribuye a esos políticos mesiánicos la responsabilidad de lo que está ocurriendo en la oposición?

El mesianismo no es solamente por esos lados. Venezuela tiene un problema grave con eso, porque por todos lados, hay dirigentes políticos que no son ni siquiera capaces de defender correctamente sus propios intereses. Hay quienes de los mesiánicos estaban en la línea correcta, en la línea electoral, y hay quienes de los mesiánicos que se pusieron en una actitud absolutamente irresponsable que no conducía a nada y ahora estamos cerrando ese ciclo que iniciaron en el 2014 algunos dirigentes que no te los voy a nombrar porque todo el mundo lo sabe.

Yo hice un artículo reciente en el que nombré a Leopoldo López, donde cité lo que Leopoldo López dijo en un programa de Patricia Poleo: 'Aquí no hay que estar pensando en elecciones, aquí hay que salir a la calle y generar el cambio ya', y que si el gobierno reprimía, y había un millón de gente en la calle y el gobierno reprimía, entonces bueno, saldrían cinco millones de personas a la calle. Salió con los crespos hechos. ¿Dónde está la responsabilidad política de la gente? ¿Dónde está la responsabilidad de alguien que decidió incursionar en la política para servir a un país?

Este es el momento de la renuncia, este es un momento de grandes renuncias personales a propósitos personales, los proyectos personales en este momento, no solamente son un error: es una canallada porque le hace un daño enorme al país. De hecho, puedo decir, que el país no ha solucionado esta crisis porque los proyectos personales del liderazgo político en general comenzaron por Chávez, Nicolás Maduro y unos cuántos de la oposición no han permitido que el hueco se libere y empiece a funcionar de otra manera. ¡Llegó la hora, ya está bueno!

El mantra fue una demostración de ignorancia política

La presidencia encargada prometió el cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres. El llamado mantra. ¿Eso fue un error también?

Pero por supuesto, porque eso es una demostración de ignorancia política porque no saben dónde están parados; no han caracterizado a estas alturas todavía al adversario, no tienen una idea coherente de la dinámica de la política internacional. Yo me quedo sorprendido con personas que tienen larga experiencia en las Naciones Unidas, en diversos escenarios internacionales, que todavía sigan creyendo que Estados Unidos va a entrar a Venezuela en una guerra. Eso es una demostración de ignorancia que sorprende. O es que no son ignorantes sino que se hacen los distraídos.

El otro tema es que ante el fracaso personal desde el punto político dentro de Venezuela, optaron por irse corriendo a otros países, para que otros países resuelvan los problemas. Entonces andan desesperados cuando se dan cuenta que Donald Trump reconoce que Nicolás Maduro resultó un jugador duro, porque ellos pensaron que iba a ser una manguangua.

¿Donald Trump también cometió el error de subestimar al adversario igual que la oposición?

Por supuesto, por lo menos Donald Trump tuvo el coraje de decir que Nicolás Maduro le resultó un jugador duro. Inclusive, le está pareciendo ahora simpático, como le parece simpático Kim Il-sung de Corea de Norte y hasta el propio Putin en Rusia. Además, yo quiero decir, el libro de John Bolton es para avergonzarse como venezolano. Yo siento una vergüenza enorme como venezolano por las cosas que supuestamente se están diciendo en la Casa Blanca y en el Pentágono acerca de los venezolanos y acerca de la dirigencia opositora venezolana y acerca del propio Juan Guaidó, eso es vergonzoso, y eso les pasa por necios porque dejaron de hacer política en Venezuela para irse a pegarse de las faldas de potencias internacionales.

¿La negociación es la vía?

Bueno, siempre, siempre ha sido la vía y yo creo que hay que seguir negociando, pero hay que hacerlo bajo parámetros distintos y la verdad verdadera es que hay dirigentes de la oposición venezolana que están vetados por parte del otro sector, del poder chavista. Hay que buscar quienes sean más confiables entre ambas partes para que se sienten a negociar porque no queda otro camino, no queda otro.

Bien, pero el objetivo del gobierno sin lugar a dudas es aferrarse al poder, mantenerse en el poder. ¿Qué interés podría tener el Gobierno de Nicolás Maduro en negociar con la oposición?

¡Qué buena pregunta! Ahí está el tema de los incentivos. La única posibilidad que tiene el gobierno de sentarse a negociar es que piense que ya no puede manejar al país. Ahí es donde digo que no todo es perfecto por los lados del gobierno. El gobierno por concepto de renta petrolera no está recibiendo ni medio, ni un centavo de dólar prácticamente. ¿De dónde va a sacar dinero Nicolás Maduro para pagar la nómina? Eso es una brecha que obliga al Gobierno de Nicolás Maduro a tomar decisiones. Pero tú tienes que entregarle a ellos garantías, incentivos.

Lo que he dicho en diversas oportunidades que lo que más le conviene al gobierno es salir corriendo y entregar ese paquete a otro, garantizándole a ellos su supervivencia política. El problema es que ellos no confían en que los partidos del G4 y sobre todo, dos partidos políticos.

¿Cuáles son esos dos partidos?

Voluntad Popular y una parte de Primero Justicia. Entonces, si la conclusión que hay es que esto se resuelve a partir de la mesa de negociación, tal como lo ha dicho el propio Estados Unidos, el propio Elliott Abrams, entonces lo que tenemos que hacer es que aquellos que obstaculizan las negociaciones que se hagan a un lado, que se hagan a un lado por el bien del país.

¿Las sanciones de la Administración Trump irían encaminadas a presionar al gobierno hacia una negociación?

Por supuesto, nadie más que el presidente Trump y el Gobierno de Estados Unidos quieren que este problema se resuelva lo antes posible porque están entrampados en este paquete. Pero el tema es que hay opositores que siguen dando información equivocada, creándoles expectativas inexistentes como pasó el 23 de febrero del año pasado.

Vicente Díaz dijo en una entrevista a este portal que el chavismo se ha cohesionado como resultado de las sanciones. ¿Eso es así?

Por supuesto, todos están afectados. A veces pasan cosas que yo no las entiendo. Por un lado, están algunos opositores venezolanos y el propio Gobierno de los Estados Unidos pidiéndole a los militares venezolanos que intervengan y que se le opongan a Maduro, pero algunos militares venezolanos que decidieron dar ese paso, como fue el caso de Clíver Alcalá Cordones, terminaron en manos de la DEA.

¿Cómo avizora a la dirigencia opositora en los próximos meses. ¿Cree que haya una recomposición de fuerzas, una reorientación de estrategias?

Yo creo que el piso opositor se va a mover muchísimo en los próximos meses, porque la mayoría de los dirigentes de oposición, quisieran participar en el proceso electoral aún en las actuales condiciones. En Acción Democrática, la inmensa mayoría del liderazgo quiere participar en este proceso electoral. En Primero Justicia pasa lo mismo, en Un Nuevo Tiempo igualmente, para hablar de las fuerzas políticas más importantes del país, en términos numéricos. Entonces, yo creo que eso le va a generar a los partidos políticos un dilema enorme. No quiero aventurarme en detallar lo que les va a pasar. Lo que sí sé, es que o corrigen o rectifican con sabiduría, o los resultados no serán fáciles.