Pacientes de sanatorio mental público comen sus heces para contrarrestar el hambre

Caracas, 25 de enero.- La desnutrición se ha convertido en una de las principales causas de muerte en Venezuela, y los pacientes psiquiátricos  no escapan a esta realidad.

El portal Venezuela al Día publicó un articulo que expresa que desde febrero hasta agosto se registró el fallecimiento de 20 pacientes en el Instituto Mental La Paz, un centro privado y subsidiado por el Gobierno en la vía entre San Diego y el municipio Carrizal del estado Miranda.

Funcionarios del Ministerio de Salud y de la Defensoría del Pueblo han realizado varias inspecciones, pero no han encendido las alarmas frente a la realidad que encuentran. Por ejemplo, el hecho que los propios pacientes salen a la calle a pedir dinero y regresan a descansar.

Algunos de ellos muestran graves signos de mala alimentación. Permanecen costados en el piso y delirando bajo el sol, entre heces y gusanos.

En el patio de la institución , muchos se lamentan por el hambre ya que pasan días que no comen absolutamente nada. Los familiares, bajo condición de anonimato, denuncian que la situación se ha prolongado por mucho tiempo.

Un vecino de la comunidad alertó que un paciente falleció "porque se comió una rata, estaba desesperado por el hambre”.El centro La Paz recibe recursos del Gobierno para alimentación de los internos, no obstante estos no se han justificado, por lo menos desde principios de año, cuando la situación empezó a tornarse crítica.

Muchos de los internos están bajo su propia suerte, ya que no reciben visita y por lo tanto no les llevan alimentos desde afuera. Su dieta se limita a lo que puedan encontrar. Los propios trabajadores del centro afirman que en varias oportunidades los pacientes se han comido sus heces y las de otros.

Para el reportaje declaró uno de los internos que aún posee un poco de lucidez: “Unos se comen su mierda, yo fumo y tomo agua, así puedo aguantar todo el día, cuando no tengo que fumar me voy para la calle o me asomo y pido cigarros”. Otro agregó que todas las mañanas se escapa y camina hasta un camión de verduras para que le regalen algo. Los residentes de la zona los ayudan cuando está dentro de sus posibilidades.

Otra de las denuncias es algunos empleados del centro se llevan a los pacientes más sanos trabajar para su casa. El director de la institución, Mario Leal, brilló por su ausencia, ya que  se encuentra de vacaciones desde hace algunos días en Nueva York y no saben cuando regresa

Respecto al tema de los fallecimientos, de 20 internos que han muerto, solo se ha podido acceder a 10 actas donde se señalan tres repetitivas causas de muerte, problemas de hipertensión, infartos al miocardio y afecciones respiratorias.Otra irregularidad presentada en los mismo fue la identidad del “familiar” que solicitó el documento en el Registro Civil: Carlos Alberto Berríos Terán, un enfermero del centro que colocó como su dirección de domicilio las instalaciones del Sanatorio Mental La Paz.

Los familiares esperan que con la difusión de estas imágenes se pueda sensibilizar a la opinión pública y que las autoridades se aboquen a resolver esta situación.