Se hizo una prueba de ADN y descubrió que su abuela era sospechosa de un crimen sin resolver

Caracas / Foto: CNN.- Una simple prueba de ADN, realizada por curiosidad, reveló un oscuro capítulo en la historia de la familia Gerwatowski y ha llevado a la policía a reabrir un caso de homicidio que había permanecido en la sombra durante 27 años en Estados Unidos.

Lea también: WhatsApp anuncia nuevas funciones para las videollamadas

La vida de la tiktoker Jenna Gerwatowski dio un giro inesperado cuando, en mayo de 2022, recibió una llamada de un detective que aseguraba que su ADN coincidía con el del “bebé Garnet”, un infante encontrado muerto en un pozo en Garnet Lake en 1997, según CNN.

El caso del “bebé Garnet” había sido un enigma en la comunidad, con la identidad del bebé y su madre permaneciendo desconocidas durante años.

La investigación, que se había enfriado con el tiempo, cobró nueva vida cuando el ADN extraído de los restos del bebé llevó a los detectives a la prueba de ADN de Jenna, realizada meses atrás por diversión.

Era la mitad de la jornada laboral de Jenna Gerwatowski en la floristería local en Newberry, Michigan, cuando recibió una llamada de un número desconocido.

La mujer, que ahora tiene 23 años, no suele responder llamadas de números desconocidos, pero dice que decidió contestar esta vez. Para su sorpresa, era un detective de la Policía de Michigan.

“¿Has oído hablar del caso del bebé Garnet?”, fue la inquietante pregunta que le hizo el detective, desencadenando una serie de eventos que la llevarían a descubrir un oscuro secreto familiar.

Jenna había escuchado sobre el caso. En 1997, se descubrió el cadáver de un bebé en un pozo de baño de un camping en Garnet Lake, el lugar donde creció. Según un comunicado de la oficina del fiscal general de Michigan, los investigadores no lograron encontrar ninguna pista sobre la identidad del bebé ni sobre alguien que hubiera visto a una persona dejando al niño.

Con el paso del tiempo, la investigación se estancó y el caso del "bebé Garnet" se transformó en un famoso misterio relacionado con un asesinato en el pequeño pueblo de Jenna.

"Tu ADN coincide", fue lo que el detective le comunicó por teléfono, relacionado con el bebé fallecido en 1997.

Jenna se encontraba en estado de shock. Aunque el detective sonaba seguro, no podía evitar preguntarse cómo había obtenido su ADN.

Aproximadamente seis meses antes, una amiga le regaló una prueba de FamilyTreeDNA y Jenna decidió hacer lo mismo. Según documentos judiciales, el ADN de otros familiares del bebé Garnet llevó a los detectives al kit de FamilyTreeDNA de la mujer.

El detective le informó que una mujer de Identifinders International, una empresa de investigación en genealogía genética, se pondría en contacto con ella para ayudarla a identificar parientes cercanos.

Los documentos judiciales indican que los detectives reabrieron el caso en 2017 y trabajaron con una empresa forense para extraer ADN del fémur parcial del bebé Garnet, enviando luego los resultados a Identifinders International.

Cuando Jenna regresó a casa del trabajo, explicó la situación a su madre. "Fue una locura", comentó. Ambas estaban perplejas, sin tener idea de quién podría ser el responsable.

Esa noche, Misty Gillis, una genealogista forense de Identifinders International, llamó a Jenna para solicitar su contraseña de FamilyTreeDNA para cargar su ADN en una base de datos. Jenna se mostró escéptica y se negó a cooperar, preocupada de que fuera un intento de estafa.

Una semana después, mientras trabajaba en una floristería, recibió una llamada angustiosa de su madre pidiéndole que regresara a casa de inmediato. Al llegar, encontró a su prima y a su madre, quienes le explicaron la situación del bebé Garnet, confirmando que no era una estafa.

Aunque Jenna sabía que no estaba implicada en el caso, temía que la policía pensara que ocultaba información debido a su negativa inicial a hablar con Gillis, así que decidió llamarla.

La prueba de ADN reveló que Jenna era la sobrina del bebé Garnet, y el 1 de junio de 2022, los detectives hablaron con su madre, Kara, quien también proporcionó su ADN, resultando ser la media hermana del bebé.

"Siento que fue entonces cuando todas las piezas del rompecabezas comenzaron a encajar para ella", comentó Jenna. Kara no había tenido contacto con su madre, Nancy Gerwatowski, desde los 18 años, y Jenna nunca había conocido a su abuela. Ambas se sorprendieron al descubrir que Nancy, que vivía en Wyoming en ese momento, era la responsable del misterio en su ciudad.

La oficina del fiscal general de Michigan sostiene que Nancy dio a luz al bebé sola en su casa de Newberry, donde Garnet falleció por asfixia, y que esta muerte podría haberse evitado con intervención médica que Nancy no buscó. No obstante, la defensa de Nancy argumenta que el nacimiento fue inesperado y que ella intentó ayudar al feto, pero perdió el conocimiento durante el proceso.

Nancy enfrenta cargos de "homicidio con gradación abierta", homicidio involuntario y ocultar la muerte de un individuo, lo que podría resultar en una sentencia de cadena perpetua. Su defensa espera que el caso sea desestimado, alegando que el estado no puede probar que el feto nació con vida.

"Fue un momento muy difícil, traumático y estresante", comentó Jenna. "Nunca conocí a esta mujer, así que fue complicado para mí entender la situación, pero aún más difícil para mi madre, ya que esa era su madre".