Telefónica despide a su CEO en Venezuela tras sanciones impuestas por EE. UU.

Caracas / Foto: Cortesía.- La operadora española Telefónica tomó la decisión de despedir a Pedro Cortez, quien se desempeñaba como director ejecutivo de su filial en Venezuela, tras la reciente imposición de una multa de 85 millones de dólares por parte del Departamento de Justicia de Estados Unidos.

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Según El Confidencial, esta sanción responde a la implicación de la empresa en un "esquema de sobornos" destinados a funcionarios del gobierno venezolano, utilizando cuentas bancarias estadounidenses para "eludir las restricciones que plantea la devaluada moneda local".

La información sobre la sanción, una de las más considerables impuestas a una empresa española en el ámbito internacional, fue revelada el pasado viernes. Según informes, los pagos ilegales se "ocultaron mediante transacciones con proveedores chinos, en las que se adquiría material a precios notablemente inflados".

Implicación de Pedro Cortez

Cortez, quien ocupó el cargo de CEO de Telefónica Venezuela desde 2012 hasta 2018, había sido promovido a director del negocio de la firma en Perú antes de asumir en 2023 la dirección de la estrategia para la región Hispam, que incluye varios países latinoamericanos.

Sin embargo, su relación con la empresa terminó en verano pasado, en medio de este contexto conflictivo. Durante su gestión, el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, y Ángel Vilà, director de Finanzas Corporativas, no fueron involucrados en las "irregularidades" tras una auditoría interna que eximió a ambos de responsabilidades, confirmando que las "operaciones fraudulentas se limitaron únicamente a la filial venezolana".

Además, Telefónica había estado al tanto de las posibles sanciones desde hace meses y, antes de que se conociera la resolución, comenzó a negociar con las autoridades estadounidenses para minimizar el impacto del asunto y evitar un juicio que podría haber acarreado consecuencias más severas.

En el marco de este acuerdo, se incluyó la exigencia del despido de quienes estaban al mando durante la ocurrencia de los sobornos.

A partir de este escándalo, la compañía dice estar "reforzando en sus políticas de cumplimiento normativo y anti-corrupción". La firma ha manifestado su compromiso con la cooperación en futuras investigaciones y la adhesión rigurosa a las normativas contra la corrupción y el blanqueo de capitales.

Telefónica, que está parcialmente participada por el gobierno español y Criteria Caixa, ha enfrentado en el pasado otras sanciones por irregularidades de diversa índole, como la que ya había acordado en 2014, donde debió pagar 4 millones de dólares por obsequiar entradas del Mundial de Brasil.