Un adolescente confesó planificar el ataque suicida en el concierto de Taylor Swift en Viena

Caracas. Las autoridades han logrado que el joven de 19 años, Beran A, confesara que se había preparado intensamente y estaba concentrado en planificar el ataque terrorista contra los asistentes al concierto de Taylor Swift en el Ernst-Happel-Stadion de Viena. El ataque, que incluía acuchillar a los asistentes para hacer detonar luego una bomba suicida, fue alertado inicialmente por los servicios de inteligencia de Estados Unidos al gobierno de Austria, quienes procedieron a hacerle seguimiento y allanar la casa del joven terrorista.

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En la requisa a su domicilio, consiguieron munición de fogueo, 21.000 euros falsos y una luz intermitente de las que utiliza la policía, así como una sirena, que pensaba utilizar para llegar al lugar sin despertar sospechas, según informó el tabloide alemán Bild.

Los  medios de comunicación austríacos, destacan que Beran A. y su cómplice, de 17 años, querían lanzar el ataque a las 4 de la tarde, cuando el exterior del estadio estaría abarrotado de miles de aficionados esperando para entrar al concierto de Taylor Swift, ya que a esa hora los guardias de seguridad debían abrir las puertas y ellos aprovecharían la muchedumbre agolpada para atacarlos con cuchillos, machetes y finalmente, detonar la bomba suicida.

La policía de Viena ha logrado recuperar un video que hizo Beran A. realizando  un juramento de lealtad al actual líder del grupo Estado Islámico (ISIS) y otro video en el que se confiesa responsable del ataque.

Las autoridades también encontraron material del grupo Estado Islámico y de Al Qaeda en la casa del segundo sospechoso, un joven austriaco de 17 años que  prestaba servicios en el recinto de los conciertos.

Fuentes policiales dijeron a ABC News que la información sobre la amenaza a los espectáculos de Taylor Swift se originó en la inteligencia estadounidense y se transmitió a los austriacos y a Europol el 25 de julio.

"Los sospechosos tenían planes concretos y detallados para crear una tragedia de la misma magnitud que los atentados de París, Manchester y Moscú, también en un concierto, con mucha gente, y dejar un baño de sangre", dijo el canciller austriaco Karl Nehammer en una conferencia de prensa reciente.

"Es realmente inconcebible pensar en el daño inmensurable que podría haber creado un ataque exitoso", añadió.

El nombre del segundo sospechoso, de 17 años, aún no se ha hecho público. Se dice que tiene nacionalidad austriaca, pero raíces turcas y croatas y, al parecer, estuvo en "contacto intenso" con Beran A. durante los últimos días.

Los vecinos del joven terrorista dijeron que había cambiado completamente su apariencia y que, de ser un chico inofensivo hasta hace poco tiempo,  de pronto comenzó a dejarse  crecer la barba y vestir diferente. De hecho, una nueva foto suya lo mostraba posando con enormes cuchillos  y una bandera del ISIS.

Las autoridades policiales también consiguieron productos químicos para producir el explosivo triperóxido de triacetona (TATP), con el que Beran A. —quien se dice que es el cerebro detrás del complot— ya habría experimentado y es el explosivo que suele utilizar ISIS en ataques terroristas.

El director de la Dirección de Seguridad e Inteligencia del Estado, Omar Haijawi-Pirchner, afirmó que Beran A. "se ha radicalizado claramente en la dirección del Estado Islámico y cree que es correcto matar a los infieles".

El joven de 17 años visitaba regularmente una mezquita en el distrito de Meidling de Viena y llevaba pegatinas de ISIS en su billetera cuando fue arrestado.